#Cultura | El recinto recobrará y contará de manera ágil y didáctica las historias que se han perdido por la erosión del valle provocada por los fuertes vientos
Ciudad de México.- El Museo Arqueológico de La Quemada en Zacatecas se integró a la red de museos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y será reabierto al público en el equinoccio de primavera, en marzo próximo.
Mediante un convenio de colaboración entre el INAH y el Gobierno del Estado se han iniciado los trabajos de rehabilitación del hoy Museo de Sitio de la Zona Arqueológica. Carlos Alberto Torreblanca Padilla, director de recinto, explicó que ya se retira la techumbre —la cual presentaba serios problemas de humedad—, y empezará el proceso de impermeabilización y reparación del techo, se informó en un comunicado.
Una vez resueltos los problemas de filtración de agua que ha padecido el edificio, se llevará a cabo la rehabilitación completa del inmueble. Al mismo tiempo, ha comenzado la curaduría de piezas que se exhibirán y se trabaja en una serie de entrevistas con los investigadores que han estudiado el sitio para, a partir de sus voces y testimonios, reconstruir la historia de la arqueología en este sitio que alberga la cultura del Valle de Malpaso e integrarla al discurso museográfico.
El contenido del museo cambiará totalmente, explicó Torreblanca Padilla, ya que ahora no pretende abarcar la arqueología regional, pues ya existen otros museos de sitio y zonas arqueológicas abiertas al público para abordar cada caso a detalle; el Museo de Sitio de La Quemada se centrará en la cultura de Valle de Malpaso, La Quemada, sin dejar de abordar, de manera general, el contexto de su entorno y mencionar a los otros sitios prehispánicos de la región.
Respecto a la museografía, el arqueólogo destacó que la gran maqueta a escala —en la que se representa cada uno de los niveles que conforman la zona arqueológica— permanecerá en su lugar y será sometida a trabajos de conservación. También, se pretende que el discurso explique de manera ágil y didáctica los sistemas constructivos de las edificaciones prehispánicas que ahí se levantaron, es decir; cómo se construyeron y con qué materiales.
La Quemada —abierta al público en 1966— es una de las urbes prehispánicas más grandes del norte de México, junto con Paquimé, en Chihuahua, y Cerro de Trincheras, en Sonora. Está asentada en 216 hectáreas, sobre cinco niveles o terrazas respecto al Valle de Malpaso, en las laderas de un cerro de 150 metros de altura. Mucha de su historia se ha perdido como resultado de la erosión provocada por el fuerte viento que pega en el valle, por lo que el INAH trabaja para que el museo de sitio vuelva a contar las antiguas historias de la población del Valle de Malpaso.