#México | Promueven el desarrollo de aplicaciones para dispositivos móviles y servicios web en beneficio del sector productivo nacional
México.- El INIFAP promueve el desarrollo de aplicaciones para dispositivos móviles y servicios web en beneficio del sector productivo nacional.
El Instituto concentra y distribuye bases de datos climáticos y trabaja de manera coordinada para mejorar la oferta de productos y servicios informáticos y desarrollos tecnológicos.
Administra 440 estaciones meteorológicas automáticas distribuidas en el país, que son el fundamento de la emisión de alertas fitosanitarias sobre la probabilidad de ocurrencia de plagas y enfermedades.
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural impulsa el desarrollo e innovación tecnológica en sus centros de investigación con el fin de acercar el conocimiento aplicado en el campo a los productores de México, sobre todo a los de pequeña y mediana escala.
Bajo esta dinámica de trabajo, el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP) trabaja en concentrar y distribuir bases de datos meteorológicas y generar aplicaciones para dispositivos móviles y servicios web en beneficio del sector productivo en México.
Se trata de un principio de trabajo del Laboratorio Nacional de Modelaje y Sensores Remotos (LNMySR), donde el INIFAP administra los datos quinceminutales de 440 estaciones meteorológicas automáticas distribuidas en el territorio mexicano, que también emiten alertas fitosanitarias sobre la probabilidad de ocurrencia de plagas y enfermedades en una gama de sistemas producto.
El laboratorio ofrece cursos y talleres presenciales y en línea donde se capacita a técnicos y productores, promueve la firma de convenios de colaboración para el intercambio de bases de datos climáticos, y trabaja de manera coordinada para mejorar la oferta de productos y servicios informáticos y desarrollos tecnológicos que impactan el campo en México.
El investigador responsable del LNMySR del Instituto —organismo descentralizado de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural—, Víctor M. Rodríguez Moreno, en su presentación “Pronóstico numérico del clima”, destacó la oferta institucional de productos y servicios relacionados con el modelado de datos.
Señaló la fuerte asociación de los datos registrados en la Red Nacional de Estaciones Agrometeorológicas Automáticas, que administra el INIFAP, como punto toral en el proceso de validación de las salidas del pronóstico numérico.
Indicó que la relevancia del pronóstico numérico es fundamental, dado que el clima afecta las actividades agrícolas, y su obtención inicia con la recopilación de una serie de datos en el tiempo.
En el proceso de generación del pronóstico se utilizan co-variables como el modelo de elevación digital y algunos recursos topográficos, se aplican pruebas de análisis de datos como regresión múltiple, redes neuronales y correlación canónica, con lo cual se asegura la precisión de los mapas de salida, detalló.
Manifestó que el modelado numérico de las variables meteorológicas más asociadas con el seguimiento al dinamismo de los sistemas de producción es a escala nacional, cubre un periodo de cinco días, y se actualiza diariamente.
Cada hora, refirió, el Laboratorio obtiene una radiografía climática del territorio nacional, incluidas las masas oceánicas, la frontera norte y la frontera sur.
Al explicar el desarrollo técnico, destacó que el proceso de modelado demanda una importante cantidad de recursos de cómputo para el procesamiento y almacenamiento de archivos temporales y finales.
Con la infraestructura instalada en el laboratorio, comentó, se pueden obtener simulaciones de escala local o regional a un kilómetro. A esta resolución espacial los mapas temáticos son ideales para evaluar el dinamismo en el uso del suelo a través de la obtención de: indicadores sobre sequía, uso del agua, proximidad de eventos meteorológicos extremos de viento y lluvia, y la proveeduría de datos del clima a los sistemas para la medición del riesgo.
En la gama de procesos físicos simulados destacan los ciclos estacionales y diurnos, flujos de calor sensible y latente, capa límite del planeta, gases de efecto invernadero, aerosoles, capa de hielo, dinamismo de la cubierta vegetal del suelo, circulación oceánica y ciclo biogeoquímico del carbono, entre otros.