Ante la emergencia sanitaria ocasionada por COVID-19, mucho se ha hablado de los posibles tratamientos de prevención y reforzamiento del sistema inmunológico para evitar el contagio de esta enfermedad, o bien reducir el daño que este virus podría ocasionar. Hallar una solución efectiva ha llamado la atención de la comunidad estudiantil y científica, tal es el caso de cuatro estudiantes de la Universidad del Valle de México, Campus Toluca, quienes analizaron la efectividad de encapsular aceites esenciales de cebolla morada y ajo para el reforzamiento del sistema inmunológico.
Michelle Alva, Leslie Álvarez, Ivana García y Verónica Estrada son estudiantes del sexto semestre de la licenciatura en Químico Farmacéutico Biotecnológico quienes guiadas por la profesora Araceli Álvarez, identificaron que tanto el ajo como la cebolla morada tienen propiedades beneficiosas para promover el buen estado de salud al consumirse en cantidades específicas.
“El ajo y la cebolla morada tienen compuestos organosulfurados por ser vegetales del género Allium, sin embargo, su sabor y olor no son del agrado de muchas personas. Para impulsar el consumo y beneficios de estos productos, quisimos investigar la efectividad del proceso de microencapsulación de aceites esenciales, ya que es un proceso fácil, económico y sobre todo asegura la conservación de las propiedades benéficas, eliminando el olor y mal sabor”, comenta Ivana García una de las estudiantes que participó en dicha investigación.
El ajo y la cebolla morada son vegetales ricos en minerales, aminoácidos, fibras y vitaminas como la C y la A, que al consumirse a través de la microencapsulación el cuerpo humano podrá aprovechar en su beneficio al recibir las propiedades totales, contrario a si estos productos se consumen dentro de la dieta diaria, ya que al cocinarse pierden sus bondades.
Si bien en el mercado existen diferentes opciones para reforzar el sistema inmunológico, la relevancia de la propuesta de las estudiantes de la UVM se enfoca en la creación de un producto medicinal basado en elementos naturales, con el objetivo de reducir el consumo de fármacos, polvos o cápsulas. Bajo el contexto actual, esta sería una contribución para fortalecer la salud ante el virus SARS-Cov2, así como para evitar otras bacterias y hongos.
Estudios recientes revelan que la combinación de aceites esenciales de ambos vegetales prometen resultados efectivos contra la actividad del SARS-Cov2, al ser un virus mutante, el consumo de estos aceites podría ayudar a la prevención de posibles rebrotes estacionales, además de reforzar el sistema inmune.
“Si una persona que ya recibió la vacuna contra COVID-19, consume aceites esenciales de cebolla morada y ajo, reforzará los anticuerpos adquiridos con la vacuna. En el caso de las personas que aún no han sido vacunados, el consumo de estos aceites les servirá como prevención de la enfermedad”, comentan las estudiantes. Quienes actualmente se encuentran en la primera etapa de investigación, con deseos de volver a las aulas pronto para continuar con el proceso experimental de su proyecto y determinar la dosis exacta que se requeriría para el consumo humano.
Con esta propuesta de investigación, las alumnas fueron acreedoras al Primer Lugar en el Evento de Investigación en el Campus Toluca de UVM. “Nuestro objetivo con esta investigación es aportar a la sociedad algo novedoso y efectivo para reforzar el sistema inmunológico de manera natural, con vegetales o plantas fáciles de encontrar y accesibles para todos, a través de la microencapsulación podremos lograr este objetivo”, finalizó Verónica Vega.