#México | La encuesta es un referente obligado para atender las necesidades de los infantes en esta crisis sanitaria
México.- La pérdida del empleo de sus padres, la vulnerabilidad económica, la muerte de algún familiar por Covid-19, que sus abuelas o abuelos se encuentren solos, que no puedan regresar a clases o la violencia en el hogar, son algunas de las preocupaciones de niñas, niños y adolescentes durante la pandemia.
Así lo reveló el estudio “Infancias encerradas”, que se presentó este jueves a la Comisión de los Derechos de la Niñez y la Adolescencia, que preside la senadora del PAN Josefina Vázquez Mota.
Es una consulta en línea a 40 mil 427 menores entre los seis y 17 años, elaborado por la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, del 27 de mayo al 15 de junio, para conocer sus opiniones, sentimientos, pensamientos sobre la manera en que viven el confinamiento derivado del nuevo coronavirus.
Vázquez Mota dijo que para el Senado de la República la encuesta es un referente obligado para atender las necesidades de los infantes en esta crisis sanitaria. “Tenemos dos caminos: paralizarnos frente a estas voces o abrazarlas y actuar en consecuencia”, apuntó.
La senadora señaló algunas respuestas de los menores: al 85 por ciento les preocupa mucho que las personas de su familia se mueran por el Coivid-19 y a 70 de cada 100 que algún familiar pierda el empleo.
Casi el 60 por ciento, agregó, mostró inquietud porque sus abuelos, abuelas y otras personas mayores tengan que pasar tiempo solas, a más del 40 por ciento le preocupa que les falte comida y el mismo porcentaje que haya personas que se vuelvan violentas por no poder salir a la calle y hacer una vida normal.
Josefina Vázquez Mota también indicó que como consecuencia de esta pandemia, Unicef México señala que alrededor de 35 por ciento de los hogares, en donde habitan niñas, niños y adolescentes, han aumentado las discusiones y las tensiones.
Nashieli Ramírez Hernández, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, dijo que entre los retos está garantizar la seguridad de los infantes en el uso del Internet, “no bajar la guardia” para atender las preocupaciones de las niñas, niños y adolescentes, así como para evitar el incremento de contagios en este sector de la población.
Urgió fortalecer los programas de salud mental, atender los temas de manera intersectorial, incluir la participación infantil en todas las leyes que se refieran a los menores y avanzar en el cuidado como un derecho.