Los residentes de la capital española se sorprendieron tras una nevada persistente que cubrió de blanco gran parte del país con una precipitación que no ocurría desde hacía 50 años.
La nevada mató al menos a cuatro personas y dejó a miles atrapadas en autos, estaciones de trenes y aeropuertos, donde las operaciones fueron suspendidas hasta nuevo aviso.
“Mucho frío, sin comida, sin agua, gente llorando y la gente se ha quedado atrapada allí, sin saber cuándo vamos a poder salir”, contó una residente que quedó atrapada en su auto el viernes en la noche y llegó a sus casa 12 horas después.
Sin embargo, muchas personas se atrevieron a salir a las calles para hacer muñecos de nieve, esquiar y hasta sacar trineos.
📸 AP/Reuters