La diputada Bernarda Reyes Hernández comentó que es un reconocimiento a la gran labor que realizan y para apoyar la creación de políticas públicas y desarrollo de sus actividades

A propuesta de la diputada Bernarda Reyes Hernández, el pleno del Congreso del Estado aprobó declarar en la Entidad, el 19 de marzo de cada año “Día de las Artesanas y los Artesanos Potosinos”.

Con esta declaratoria, se reconoce su gran labor para apoyar a generar una mayor visibilidad, con la creación de políticas públicas y desarrollo de actividades como concursos y exposiciones, que incentiven y detonen el desarrollo de nuestras artesanas y artesanos.

Se indica en el dictamen respectivo, que la actividad artesanal significa, una ruta hacia el desarrollo económico comunitario, lo que resulta en la generación de recursos económicos para muchas familias; ya que, la artesanía es un importante recurso para apreciar las expresiones populares del arte en diversos materiales, originarios del Estado y zonas en donde se fabrican.

El día 19 de marzo de cada año, se conmemora el Día Internacional del Artesano, y con ello, se reconoce un antiguo oficio manual que requiere destreza y creatividad para la creación de piezas artísticas únicas y originales.

Esta fecha de celebración de este día internacional coincide con el Día de San José celebrado por la religión católica, quien era carpintero y artesano de oficio. Las y los artesanos del Estado, generan objetos y productos con identidad cultural comunitaria, por procesos manuales continuos, auxiliados por implementos rudimentarios y algunos de función mecánica que aligeran a ciertas tareas; la materia prima utilizada generalmente es obtenida de la región en donde habitan.

El dominio de las técnicas tradicionales de patrimonio, permite al artesano crear diferentes objetos de variada calidad y maestría, imprimiendo en estos, además, valores simbólicos e ideológicos de la cultura del Estado.

Por ello, se indica, los artesanos del estado contribuyen con la conservación, de la tradición cultural de los pueblos, donde sus artesanías representan la identidad comunitaria que pasa de padres a hijos, del maestro al aprendiz y son hechas por procesos manuales.

Ser artesano, es un desafío, donde se mezcla la creatividad, la comunicación y el factor económico, debiendo conjugar el oficio, la mecánica de las herramientas, su biología en términos de fuerza y habilidad motriz junto con cierto sentido de la belleza y de la oportunidad para entender qué tipo de objeto van a crear y reproducir.