#Zacatecas| Cientos de devotos locales y foráneos, aguardaron desde muy temprano a las afueras del nuevo templo con una capacidad de 500 personas

Guadalupe, Zacatecas.- Este lunes, se realizó la “dedicación” religiosa del nuevo templo de Zóquite en el municipio de Guadalupe, Zacatecas, a “La epifanía del señor”. En su interior guarda al niño Dios más grande del mundo.

Al gigantesco niño Dios, le modificaron los ojos de azules a cafés, hicieron una reducción de abdomen y ligeros cambios en el rostro para adecuarlo a la población local.

“Me siento muy agradecido, me siento asombrado precisamente por lo que es capaz de mover la fe, la fe mueve montañas, la fe mueve pueblos y hoy todo esto es mucho más visible, por eso también es de llamar la atención este fenómeno que está viviendo Zóquite, sino hubiera sido por esto no es conocido en el mundo; yo creo que es una expresión de fe, podemos estar o no de acuerdo en el tamaño, en la proporción, en los colores, en el momento, pero lo que no tenemos que dudar en ningún momento es la expresión de fe”, comento Sigifredo Noriega, obispo de la Diócesis de Zacatecas.

Cientos de devotos locales y foráneos, aguardaron desde muy temprano a las afueras del nuevo templo con una capacidad de 500 personas, no todos pudieron entrar; tuvieron preferencia los habitantes de Zóquite quienes por cerca de una década aportaron más de seis millones de pesos para su nuevo templo -incluida la colosal escultura-.

El nuevo niño Dios, se suma al Santo Niño de Atocha y al niño de las Palomitas, que anualmente atraen a Zacatecas a miles de devotos religiosos.

El comité parroquial responsable de la construcción de la colosal estructura nunca imaginó la fama que tendría el niño Dios gigante, invitaron a todo el mundo a conocerlo guardando el respeto.

A partir de este lunes el nuevo templo queda abierto a la población y de estados vecinos ya se han recibido solicitudes para visitarlo masivamente.