#UASLP | Se llevó a cabo la Jornada por la erradicación de la violencia contra las mujeres en la UASLP. Memoria y verdad
San Luis Potosí, SLP.- La Defensora de Promoción y Difusión de la Defensoría de los Derechos Universitarios, Mtra. Beatriz Sarahí Aguilera Gallegos, comentó que las actividades en el marco de la Jornada por la erradicación de la violencia contra las mujeres en la UASLP, marcó un precedente importante, apoyado desde esta administración a cargo del rector Alejandro Zermeño Guerra, y bajo el liderazgo de la doctora Urenda Navarro Sánchez, titular de la Defensoría de los Derechos Universitarios.
La maestra Aguilera Gallegos, destacó que, sin duda, la institución ha avanzado en diversos aspectos para generar espacios dignos y seguros en la Institución. Dicha actividad ha permitido reunir una serie de esfuerzos en diferentes áreas, desarrollando eventos académicos, artísticos, develación de placa, para lograr la conjunción de las Jornadas Memoria y Verdad, originadas desde el Comité Institucional para la erradicación de la violencia de género.
Sobre la deuda histórica de la UASLP con las mujeres, la académica destacó que esto significó reconocer la violencia generada desde el contexto universitario, “es importante por el mensaje claro que envió el rector donde reconocía estos actos que violentaban los derechos de las mujeres, pero a la par que se está trabajando y se inició con diversas actividades”.
Puntualizó que, a nivel nacional, la UASLP es la primera institución en realizar un acto de esta naturaleza.
“Cuando se habla de violencia de género en automático se habla de víctimas, y particularmente mujeres, desde sus distintas modalidades, por ello, se consideró necesario trabajar sobre tres aspectos: memoria, verdad y justicia, como reconocimiento de la violencia para que las actuales y futuras generaciones no pasen por alto esta situación y evitar se repita”.
Subrayó que el pasado Día Internacional de la eliminación de la violencia contra la mujer, que se conmemoró el pasado 25 de noviembre y que fue fijado desde la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en el año 2000, representa un llamado a la acción para todos los gobiernos y estados.
Concluyó que la eliminación de la violencia contra la mujer, no es tarea de unas cuantas personas o solo de la Universidad, también se requiere ese esfuerzo y acción continúa de otras instancias y de la sociedad.