El elemento murió cuando un vehículo oficial en las afueras de Tamuín hacia Ébano, fue emboscados por civiles armados
El personal del 36 Batallón de Infantería y de la 12va Zona Militar, bajo el mando del general Mario Arturo Fuentes Guevara, rindió un emotivo homenaje en honor al soldado de sanidad Alfredo Cruz Cruz, quien perdió la vida en el trágico ataque armado en Tamuín.
El incidente ocurrió cuando un vehículo oficial, ocupado por miembros del 36 Batallón de Infantería, transitaba por el Libramiento Valles-Tamuín. Al llegar al kilómetro 117, en las afueras de Tamuín hacia Ébano, fueron emboscados por civiles armados, quienes abrieron fuego contra ellos.
El soldado Jesús Fonseca Escobar, conductor de la patrulla, recibió un disparo, presumiblemente en la cabeza, y falleció instantáneamente. Como resultado, el vehículo se salió de la carretera, provocando que los demás militares cayeran tanto en la carretera como en el desnivel, donde finalmente el vehículo volcó.
Tristemente, Alfredo quedó inconsciente en medio de la carretera y fue atropellado por un camión.
El cuerpo de Alfredo fue velado en su hogar, ubicado en la colonia Real Campestre. Durante el acto, un pelotón de fusileros realizó salvas de honor, seguido por el toque de silencio interpretado por la banda de guerra del 36 Batallón de Infantería. Como muestra de respeto y gratitud por su servicio a la patria, la bandera que cubría el ataúd fue entregada a sus familiares.
Posteriormente, el cuerpo fue trasladado a la Iglesia Catedral y, finalmente, sepultado en un panteón privado adyacente al panteón de Los Abuelos del general Mario Arturo Fuentes Guevara, rindieron esta mañana, un homenaje al soldado de sanidad Alfredo Cruz Cruz, quien el pasado lunes por la madrugada, cayó en cumplimiento de su deber.
Como se informó, un vehículo oficial con militares del 36 Batallón de Infantería, iba circulando por el Libramiento Valles-Tamuín, cuando al llegar al kilómetro 117, saliendo de Tamuín hacia Ébano, fue atacado a balazos por civiles armados.
El conductor de la patrulla, soldado Jesús Fonseca Escobar, recibió un balazo al parecer en la cabeza y murió al instante, por eso la unidad se salió de la carretera, y los demás militares cayeron unos sobre la carretera y otros hacia el desnivel donde finalmente la unidad quedó volcada.
Alfredo habría quedado inconsciente sobre la carretera, y fue arrollado por un tráiler.
Su cuerpo fue velado en su domicilio particular, en la colonia Real Campestre, ahí un pelotón de fusileros detonó balas de salva, luego la banda de guerra del 36 Batallón de Infantería realizó el toque de silencio, y finalmente la bandera que estaba sobre el féretro fue entregada a sus familiares en señal de respeto y agradecimiento porque el soldado Alfredo murió por su patria.
De ahí el cuerpo fue trasladado a la Iglesia Catedral, y finalmente a un panteón particular que se ubica a un lado del panteón de Los Abuelos.