La doctora Diana María Escobar de la UASLP habló sobre los riegos de consumir agua con alto contenido en flúor
La doctora Diana María Escobar García, docente de la Facultad de Estomatología de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, dio a conocer que se está trabajando en el proyecto, “El flúor y los efectos en la salud”, y detalló los alcances y el riesgo que representa consumir agua con alto contenido en flúor; en primera instancia la fluorosis dental y la fluorosis esquelética, así como la disminución de habilidades cognitivas.
Comentó que en algunas colonias de la capital, niñas, niños y adolescentes que ya tienen dentición permanente, presentan dientes manchados, “eso es muy característico, aunque no es exclusivo de San Luis Potosí. Por lo que nosotros quisimos trabajar más, no solo en la parte estética, ya que la fluorosis ataca mucho más órgano, no solamente los dientes”.
Explicó también que afecta mucho más órgano diferente al diente y al hueso, “por lo que profundizamos mucho más allá y empezamos observando a los organelos, es decir, a células que pueden ser blanco de esta afección por el flúor, en donde nos dimos cuenta de ciertas características muy particulares, en donde efectivamente el flúor afecta directamente a la célula y disminuye la presencia de organelos importantes para su funcionamiento”.
La doctora Escobar García señaló que dentro de las investigaciones que se han venido realizando en el tema del flúor, se han encontrado que no solo afecta a los dientes o a los huesos, sino también afecta directamente a la salud mental de la población.
“La Facultad de Medicina ha hecho muchos estudios de problemas de conducta en población expuesta a flúor, pero nosotros hemos estado trabajando en el por qué una población expuesta a flúor podía tener un coeficiente intelectual disminuido y propensión a depresión y a ansiedad”.
Añadió que con los resultados que han obtenido de las pruebas de laboratorio, encontraron que efectivamente hay una relación entre el consumo de altas concentraciones de flúor y la presencia de inhibidores que van a provocar depresión o una baja cognosis en los individuos expuestos.
“Estos resultados son importantes, ya que tenemos poblaciones vulnerables como son las madres embarazadas, que, si no tienen la suficiente información sobre el agua con flúor, pueden tener una descendencia con habilidades disminuidas”.
Finalmente, la doctora Diana Escobar hizo énfasis en que una población con coeficientes disminuidas, es una población vulnerable, “lo que nosotros queremos aportar como investigadoras e investigadores, son evidencias para que se tomen medidas más drásticas con el agua”.
Cabe señalar que este trabajo de investigación continúa en proceso y está siendo realizado por un grupo multidisciplinario en donde Scarlett Ramírez, alumna de la Facultad de Estomatología, se encuentra trabajando con el doctor Roberto Salgado, de la Facultad de Ciencias.