Afirman que hay crisis laboral, además de carencias, sobre todo la falta de pagos
Desde que comenzó el año 2024 medio centenar de enfermeros y enfermeras, así como un equipo de más de 20 médicos residentes del Hospital General del ISSSTE en San Luis Potosí, no han recibido pagos, orillándolos a dejar de laborar y poniendo en riesgo de colapso la atención del nosocomio.
De acuerdo a una carta dirigida a la directora del hospital, Sandra Medina Ulibarri, la jefatura de residentes, hace del conocimiento que a partir del dos de abril tanto médicos como enfermeros suplentes se mantendrán en “asamblea permanente”, es decir que no atenderán sus labores con excepción de las emergencias extremas.
Lo anterior afecta a un sinnúmero de derechohabientes, pues las funciones de enfermería, tanto las actividades de los médicos que laboran en calidad de residentes para lograr su especialidad, son vitales para la atención digna de los enfermos derechohabientes del instituto médico federal.
El paro de labores, o “asamblea permanente” continua sin que la directora general o la encargada del departamento de Recursos Humanos (de oficio estilista de acuerdo a los afectados) hayan emitido alguna postura o camino rumbo a solución de la grave situación que enfrenta el personal.
En la misiva, cuya copia obtuvo este medio, los médicos en paro de labores especifican que dejarán de realizar actividades quirúrgicas, pases de visita, indicaciones, recetas, altas, ingresos o guardias complementarios a menos de que se trate de casos de extrema emergencia.
Esta situación deja prácticamente al hospital sin personal y a los pacientes en indefensión, sin contar con todas las carencias, atrasos y precarias condiciones con los que de manera “regular” se trabajaba.
Algunos afectados que pudieron ser cuestionados y que prefirieron guardar anonimato, explicaron que casi el 100 por ciento de sus compañeros enfermeros y médicos, solo se dedican a trabajar en el multimencionado hospital, por lo que la ausencia de pagos los somete a una situación extrema y en un asunto de “sobrevivencia”.
Ninguna autoridad hospitalaria o administrativa de la delegación estatal se ha pronunciado hasta el momento sobre el tema ni se ha informado a la sociedad respecto a la crisis laboral que están enfrentando.