La Coordinación Estatal de Protección Civil (PC), advirtióque el periodo de altas temperaturas y ausencia de lluvias llamada comúnmente “canícula”, podrían estar afectado a San Luis Potosí a partir de esta segunda quincena de julio y durante los próximos 40 días, aproximadamente.
La dependencia estatal señaló que el Servicio Meteorológico Nacional, de acuerdo con las observaciones realizadas en los últimos días, apreció una disminución de las lluvias, lo que propicia un incremento de las temperaturas en el sur, el sureste, el noreste y algunas zonas del centro de la República Mexicana, por lo que se pronostica que el fenómeno de la canícula se establezca durante la segunda quincena de julio en dichas regiones.
Explica que la canícula es conocida también como sequía intraestival, de medio verano o veranillo, su inicio, duración e intensidad está asociada a otros fenómenos atmosféricos como la intensificación de la corriente de vientos de bajos niveles del Caribe, la presencia de los sistemas semipermanentes de alta presión atmosférica (anticiclones) en los océanos Atlántico y Pacífico, la incidencia de la radiación solar y la temperatura superficial del mar, entre otros, condiciones que van cambiando en el transcurso del tiempo.
Según datos de la Comisión Nacional del Agua, “con base en los registros de lluvias, del 8 de junio al 7 de julio de 2019 se observó un acumulado de 75.9 litros por metro cuadrado, lo que representa una disminución del 36.3 por ciento con respecto a la referencia climatológica 1981-2010 para el mismo periodo”.
La Coordinación Estatal de Protección Civil explicó que esta condición no garantiza que no haya lluvias durante el periodo mencionado, sino que pueden ser menores a los referentes históricos, incluso podrían presentarse chubascos que afecten a algunas regiones.
En este sentido, acotó que, precisamente para las próximas horas podrían presentarse chubascos con actividad eléctrica acompañada de granizo y vientos de hasta 50 kilómetros por hora.
No obstante lo anterior, pidió a la ciudadanía implementar algunas medidas para reducir el riesgo de enfermedades por las altas temperaturas tales como evitar la exposición por largo tiempo a los rayos solares, no dejar personas ni mascotas dentro de autos estacionados bajo el sol, especialmente menores de edad y personas adultas mayores, hidratarse de preferencia con agua natural o con electrolitos, aún y cuando no se tenga sed, así como tener especial cuidado con los alimentos que se descomponen más rápidamente a temperatura ambiente.
Pidió también tener más conciencia hacia el ahorro de agua, tratando de usar la menos posible a través de tomarse baños de 10 minutos, utilizar una a dos cubetas de agua para lavar el carro y regar las plantas y césped por la noche para evitar en la medidas de los posible la evaporación.