Son 3 mil piezas del periodo de 1965 a 1900 que fueron cedidas en comodato
Dentro de la gran variedad de temas que se pueden consultar en el acervo del Archivo Histórico del Estado “Lic. Antonio Rocha”, se encuentra el fondo Luis Chessal Robledo, el cual contiene un volumen considerable de cartones, caricaturas e ilustraciones que este gran artista potosino realizó durante décadas dedicadas a hacer opinión a través de la gráfica, hasta convertirse en uno de los autores potosinos de mayor renombre en el periodismo local a la fecha.
El artista tiene en su haber una larga y consistente trayectoria profesional que lo posiciona no sólo como dibujante de opinión, sino también como un entusiasta promotor editorial, ya que fue dueño y director de la revista “Letras Potosinas” y en 1942 inicia su proyección como monero del diario local El Heraldo, además de ser colaborador de los suplementos culturales El Excélsior, Novedades, El Nacional y El Sol de San Luis, entre otros logros y reconocimientos, que lo convirtieron en un personaje identificado plenamente con la vida social, política, económica y cultural de San Luis Potosí.
El fondo referido agrupa una buena cantidad de piezas originales que dan cuenta del acontecer de San Luis Potosí bajo un enfoque costumbrista, analítico y picaresco, sello distintivo del trabajo gráfico que perduró por varias décadas entre el gusto de los lectores asiduos al acontecer noticioso del día a día.
Actualmente, las piezas originales cedidas en comodato al Archivo Histórico del Estado por parte de la familia de Luis Chessal Robledo, abarca un total de tres mil 347 dibujos hechos en técnica tradicional y que van desde acuarelas, dibujos a tinta, a color y en formato de 17 x 25 y 24 x 32 centímetros, todas ellas en óptimas condiciones, lo que sin lugar a dudas resulta ser un valor agregado a un fondo de estas características.
Cabe señalar que el acervo que lleva por nombre “Luis Chessal Robledo” pertenece al periodo de 1965 a 1990 y se encuentra debidamente resguardado por el área de Clasificación y Catalogación, ya que desde 2009, fecha en que llegó a manos del Archivo Histórico, se resguardan en carpetas de papel cultural libre de ácido y en cajas de archivo ordenadas numéricamente, lo que garantiza un mejor proceso de conservación con el pasar de los años.
A la fecha y desde su fundación, no existe en el archivo un acervo que lejanamente se le asemeje y es posible consultarlo bajo los lineamientos que marca la Ley de Transparencia y la Ley de Archivos
del Estado en vigor y en respuesta a la intención del Gobierno del Estado de hacer accesibles a todo público los fondos en poder de la institución.