Puestos en el ayuntamiento y dinero, se entregaron para votar por Verónica Rodríguez
Una reunión privada en el piso 18 del Hotel Fiesta Americana ha sacudido la política estatal tras revelarse que consejeros del PAN y el alcalde capitalino Enrique Galindo Ceballos participaron en una fiesta que habría incluido negociaciones para favorecer a Verónica Rodríguez en la elección de la dirigencia estatal del partido.
El encuentro, realizado anoche, se desarrolló en un ambiente de celebración con música, alcohol y una serie de reuniones discretas entre el alcalde y militantes panistas. Según trascendió, los asistentes negociaron su voto a cambio de promesas de cargos en el Ayuntamiento y la entrega de maletines con dinero en efectivo.
La presencia de Enrique Galindo, recientemente expulsado del PRI, ha generado indignación dentro y fuera del PAN, pues se trata de un actor externo al partido que aparentemente busca influir en una contienda interna crucial. Este hecho no solo pone en duda la transparencia del proceso, sino que también sugiere una estrategia para tomar control político del PAN a través de prácticas cuestionables.
“El piso 18 del Fiesta Americana se convirtió en un mercado de favores políticos”, señaló una fuente cercana al partido, quien prefirió mantenerse en el anonimato. Según testigos, los consejeros panistas desfilaron uno a uno para estrechar la mano del alcalde y cerrar acuerdos que, de confirmarse, representarían una grave violación a los principios éticos del partido.
La filtración de estos hechos ha encendido las alarmas dentro del partido, cuyos estatutos exigen imparcialidad, ética y transparencia en los procesos internos.
El escándalo pone a Verónica Rodríguez en el centro de la polémica, pues su posible cercanía con estos acuerdos podría comprometer su candidatura y la confianza de los militantes panistas. Mientras tanto, los señalamientos hacia Galindo Ceballos refuerzan su reputación como un político que no duda en recurrir a prácticas cuestionables para mantener su influencia.