Gobierno de SLP rescata, aprovecha y reestructura la infraestructura existente, para darle un mejor y más eficiente uso

El Gobierno del Cambio fortalecerá la presencia de las fuerzas de seguridad en el Altiplano potosino, con la instalación de una base operativa aprovechando la infraestructura de lo que fue el Centro de Reinserción Social de Matehuala, cerrado tras un análisis de las autoridades entre ellas, la Tercera Visitaduría de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, al no haber condiciones para la reclusión de presuntos delincuentes, debido al descuido por parte de gobiernos anteriores.

A este respecto, el general Guzmar Ángel González Castillo, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana del Estado, (SSPCE) detalló que las instalaciones de lo que durante más de 30 años fueran el Penal de Matehuala, serán destinadas para un cuartel o base operativa ya sea del Ejército, Guardia Nacional e incluso de la Guardia Civil Estatal como recién lo destacó el Gobernador Ricardo Gallardo Cardona.

Con ello, se eficientarán los esquemas de seguridad y pronta respuesta a la incidencia delictiva en esa región del Estado, al contar con mayor capacidad para albergar a más de 200 elementos de seguridad, con el equipamiento necesario en dormitorios, cocina, comedor y áreas de esparcimiento que podrían ocuparse para labores propias del personal.

De igual manera se cuenta con el espacio necesario para el resguardo de patrullas y vehículos blindados ya sea de las Fuerzas Armadas o de la Guardia Civil del Estado, facilitando un mayor y mejor despliegue operativo en los municipios y comunidades del Altiplano potosino, así como en tramos carreteros y brechas.

De esa manera y por instrucciones del mandatario estatal, se rescata, aprovecha y reestructura la infraestructura existente, para darle un mejor y más eficiente uso, lamentablemente la omisión de gobiernos pasados no dieron la importancia que requería el Sistema Penitenciario, y jamás le apostaron a la verdadera reinserción, lo que derivó en que los problemas crecieran hasta convertirse en una bomba de tiempo que la actual administración estatal atendió y trató de dar solución, sin que fuera posible hacerlo sostenible.