#MUNDO | En este mes está previsto el ingreso al país de 272 cabezas de ganado por el cruce aduanero de El Ceibo, Tabasco
Ciudad de México: México recibirá, durante junio, el primer embarque de ganado bovino guatemalteco certificado, con lo que avanzan las acciones impulsadas por el Gobierno Federal para poner fin al trasiego ilegal de reses y brindar garantías sanitarias a los engordadores nacionales, que se encargan de abastecer a la industria cárnica del país.
El primer lote consta de 272 cabezas de ganado, que ingresará por el cruce aduanero de El Ceibo, Tabasco, de acuerdo con los requisitos establecidos en el Memorándum de Entendimiento firmado por los titulares de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural de México y el Ministerio de Agricultura Ganadería y Alimentación de Guatemala (MAGA) en noviembre pasado y las certificaciones acordadas.
Los animales están certificados por médicos veterinarios oficiales del MAGA y cuentan con la supervisión sanitaria del Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA), lo que minimiza el riesgo de que entren a nuestro país enfermedades de importancia cuarentenaria (tuberculosis, brucelosis y garrapata).
Derivado de este trabajo, el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) recibió de las autoridades sanitarias guatemaltecas la versión final de los modelos de certificado de ganado bovino para engorda y sacrificio inmediato, en el que se constata que existen las condiciones sanitarias, técnicas y operativas para iniciar las importaciones de ganado hacia México.
Como método de identificación de los animales procedentes de Guatemala, el ganado portará el arete azul, que cuenta con tecnología para la trazabilidad de los animales que ingresan a México y también es avalado por el OIRSA.
A través del Certificado Zoosanitario de Importación, el Senasica registrará la identificación de los bovinos, a partir de que crucen por el punto aduanero y dará seguimiento a su movilización hacia el corral de engorda al que esté destinado el animal.
Una vez concluido el proceso de engorda, que dura entre tres y cuatro meses, los bovinos serán enviados a establecimientos de sacrificio Tipo Inspección Federal (TIF), con lo cual se completará la cadena sanitaria, que ofrece protección a la producción de cárnicos, y a la salud de los consumidores mexicanos.
La Asociación Mexicana de Engordadores de Ganado celebró el inicio de la importación de reses.